UN POQUITO SOBRE NOSOTROS

​​​​​ELEVAR LA CALIDAD DE VIDA Y DAR UNA ESPERANZA PARA EL FUTURO

Por más de 25 años, Ministerios Emmanuel ha estado ministrando a los miembros más necesitados de la sociedad en Guatemala.  Todo comenzó cuando hermano pastor Eli Turnil estaba creciendo en Guatemala y vio a la gente desesperada, desde niños hasta adultos, corriendo detrás de camiones de basura con destino al basurero local, con la esperanza de ser el primero en encontrar los alimentos desechados o quizás algo rescatable para vender para ganar lo suficiente para otra comida.  Él compartió esta historia tan triste con Larry Derapps, un amigo y miembro de la misma congregación en St. Peters, Missouri.  Ellos comenzaron a recaudar fondos y viajar por su propia cuenta para hacer una diferencia.  Desde entonces, Ministerios Emmanuel ha sido bendecido para tener al menos un equipo de voluntarios por año, cubriendo sus propios gastos y recaudando los fondos necesarios, para hacer una diferencia modesta en las vidas de los pobres y los indigentes en Guatemala.

 

Niños que tienen una mirada de desesperanza y desesperación inspiran nuestro ministerio de niños.  Familias, viudas, y huérfanos hambrientos inspiran nuestro ministerio de comestibles.  Niños durmiendo en el suelo frío, húmedo, y duro inspiran nuestro ministerio de camas.  Niños vestidos con la misma ropa sucia y rasgada todos los días inspiran nuestro ministerio de ropa.  Niños corriendo por todos lados con un solo zapato inspiran nuestro ministerio de zapatos.  Niños que no van al colegio porque no pueden comprar cuadernos ni lápices inspiran nuestro ministerio de útiles escolares.  Casas e iglesias con paredes de envoltura de plástico inspiran nuestro ministerio de construcción.  La falta de educación de calidad y el acceso a la tecnología actual inspiran nuestro Centro de Aprendizaje Emmanuel.

 

No hay mayor sensación de satisfacción que se pueda comparar con ver la cara sonriente de un niño que acaba de recibir una buena comida, ropa y zapatos nuevos, útiles escolares, y una nueva cama con sábanas y almohadas limpias; o un abrazo lleno de lágrimas y gratitud de una madre que acaba de recibir comestibles saludables por un mes para su familia; o un padre que está aprendiendo un nuevo conjunto de habilidades para proveer para su familia.  La expresión de asombro en el rostro de un niño aprendiendo a utilizar una computadora y navegar por Internet por primera vez, no tiene precio.  Nos motivan a hacer lo que hacemos.

 

Nuestro objetivo es pasar de hacer una diferencia modesta a tener un impacto tremendo.  Nos gustaría alcanzar a más gente con necesidades con nuestros ministerios y iniciar ministerios nuevos.  Sabemos que podemos lograrlo con la ayuda de personas generosas como usted.  Por favor, únase a nosotros en nuestra campaña para elevar la calidad de vida y dar una esperanza para el futuro de las personas indigentes de Guatemala.

 

¡Ayúdanos para ayudarles!